jueves, 29 de abril de 2010
deranasydarcys
martes, 27 de abril de 2010
haciadelante
lunes, 19 de abril de 2010
dedíasdeSoL
Llega la época de sol, la de los impulsos como guía de los actos de diario.
Llega, esta vez, sin demasiados agobios, con un par de cosas claras y con los colores más vivos que en otros días de luz.
Alguna canción que recuerda donde estas tú y a cuantos kilómetros de los demás, alguna que te invita a imaginar,
un libro sobre los amores ridículos…
tiempo para pensar, para hilvanar y para volver en la cabecita a los lugares que te hicieron sonreír…
y ahora esperando todo lo nuevo, lo que vendrá a sacarnos de los días que han sido grises y que se han ido tornando negros a medida que pasaban las horas, esperar a que se cumplan los deseos y a que los sueños dejen de ser sueños y pasen a formar parte de estos días de sol…y que las personas se hagan cercanas y reales y que las puedas tocar y sentir sin nada de por medio, amores de sofá que se conviertan en compañía de domingo por la tarde y que los abrazos imaginados lo hagan también…
tiempo para sentarte y comprender, para empezar a verte en el reflejo de los que te quieren, para empezar a hacerles caso y a escucharles de verdad…
quiero más días de brunch, días de día y de sentirte rodeada de los que han buscado un poquito más allá…y más conversaciones de las que siempre sacas algo en claro, más ideas para que siga haciendo, menos actos que me paren en seco y que luego me impidan avanzar.
Y ayer me dediqué a no tener resaca y terminar de leer un libro en el que alguien al que llaman Solo te va dando una pequeña lección en cada una de las cosas que dice o piensa, y aunque hoy me han dicho que ese es un libro no apto para mujeres, yo lo recomiendo desde aquí, porque además de hacerme reír ha hecho que no parara de leer y que no parara de pensar.
Acaba bien el lunes, empieza bien la semana, esto empieza a durar…!!!
Pd; le robo foto a mi compi que se me está haciendo una reportera de momentos de los que luego siempre te acuerdas…
lunes, 12 de abril de 2010
decosasqueparecenotrasyquealfinalpinchan
El otro día compré crisantemos pensando que eran margaritas, pero los crisantemos también son bonitos; esa es la actitud.
Y quiero un cactus que me recuerde todo lo que pincha, aunque alguien cercano me ha recomendado últimamente que lo que pincha mejor mantenerlo lejos, yo prefiero tener presente que esas cosas pinchosas te asaltan cuando menos te lo esperas en forma de mensaje o de grito inoportuno…y a mi cactus le pondré nombre y será una de las tantas cosaspersonasplantas que se pasean por mi vida llamándose así.
Ha llegado la luz a villadestarifo, entra por todas partes, y vuelve nuestro entorno acogedor y de un color rojizo que nos hace estar más cómodas y mejor
Los cambios han sido para bien, las fundas del sofá han tapado viejos descosidos y las ganas se acumulan en algún lugar entre la cueva númerouno y la cueva númerodos, cerca de esa habitación a la que un lunes provechoso y productivo hizo un lavado de cara y le colgó algún póster de los Gigolo Aunts y la llenó de cajas recuperadas de una habitación benicense que se muestra cada vez más vacía de unas cosas y más llena de otras y que te recuerda a otra época a la que ahora ya sabes con certeza que no quieres volver.
Y la montaña rusa parece cerrada por avería o por vacaciones o porque se ha quedado un pulpo enganchado entre las vías, la cuestión es que no puedo subir y eso me hace mantenerme a nivel del suelo todo el tiempo, perfecto para esta época de decepciones y desencantos.
Y la edad me ha debido hacer mayor y sin que me diera cuenta ha calmado el carácter que alguna vez estampó jarrones contra el suelo, y creo que a eso se le llama madurez o puede que pasotismo, ya no lo tengo muy claro…de cualquier manera, se llame como se llame, el tiempo te recuerda que nada es lo que parece y que eso de que las personas no cambian nunca no es demasiado cierto, si que parece que cambian, en algunos casos, puedo asegurar que lo hacen, el problema es que lo hacen a peor…
Y entre tanto pinchazo y crisantemo y nombre repetido parece que me encuentro bien, las bofetadas a mano abierta quitan vendas que tapan ojos que sin venda tampoco verían nada…pero cuando por fin lo ves y superas la rabieta que desencadena la nueva situación, estas un poquito mas cerca de ti misma y un poquito mas lejos de lo que no te aporta nada que te haga sentir bien, después de todo, de cualquier momento, por insignificante que sea, se acaba aprendiendo algo…
martes, 6 de abril de 2010
aempujones
Cuando te empujan y caes en lo primero que piensas es en levantarte, nada más. Ponerte otra vez en pie, sujetarte y apoyarte en lo que te rodea y volver a caminar. Perdonas y olvidas. Sigues.
Al principio andas despacito, mirándolo todo muy bien, con cuidado, con desconfianza.
Tanteas, ojeas y aprendes.
Poco a poco va desapareciendo el miedo y recuperas lo que perdiste la primera vez que acabaste en el suelo , y olvidas el tiempo que te ha costado volver a andar de la misma manera que lo hacías antes, vuelves a relajarte…luego, te vuelven a empujar, vuelves a caer, y otra vez a empezar…
Madrid ha estado lleno de risas y cañas y paseos y más cañas…y Jose que me lleva en coche para que lo vea todo bien y Paz que se preocupa de que lo mire todo bien… Desconectar, construir, imaginarte en otra vida y en otro lugar y preguntarte como sería si fueras un poco más valiente. Volver con ganas, y mas libre, y siendo consciente de que te has recuperado un poco, que no te traes apenas nada de lo que metiste en esa maleta sin fondo.
Castellón ha sido poner los pies en la tierra otra vez y darte cuenta de que por muy lejos que te vayas, cuando vuelves, todo sigue en su lugar, lo bueno y lo malo, claro.
Cuanto más me empeño en comprender a los demás, mas lejos estoy de hacerlo, que miedo da eso…
No puedo ser yo cuando los demás sacan una parte de mi que creía olvidada y tiran de ella hasta que consiguen que sea lo único que se ve, hasta donde se puede tirar es algo que todavía tengo que comprobar, pero creo que estoy a muy poquito de hacerlo…
Lo mejor de volver a casa es volver a casa…lo peor de volver a casa es el mismo obstáculo, en el mismo lugar…menos mal que esta vez he cogido carrerilla…