miércoles, 3 de febrero de 2010

deestadisticayotrasincomprensiones

No es mejor si no lo piensas, sigue ahí…te asalta cuando menos te lo esperas y te hace sonreír, para luego devolverte a la realidad…para volver a no entender nada…

Debe haber un lugar paralelo a este en el que todos tenemos lo que queremos, debe ser así…

Hacer las cosas difíciles es un don que parece poseemos muchos, desencuentros, des-miradas, cosas no dichas, o dichas cuando no toca…mensajes a deshora y a destiempo…silencios en los que hubieras gritado y gritos que no escucha nadie…y el arte de las no-cosas y el de las no-palabras, el de no ser tú cuando mas te gustaría…no momentos mágicos y no verdades y no silencios de los que no quieres huir…

En mi semana de vacaciones santillana vuelve el fantasma de lo no conseguido, el del tiempo perdido y las horas muertas, vuelve para recordarme que algo inacabado me persigue y que en algún momento tendré que plantarle cara…después de mi tarde estadística y de mi resolver el mismo ejercicio tres veces con resultados diferentes (en la vida me pasa igual) me he acercado al lugar donde las cosas siguen en el mismo sitio, donde las risas suenan al fondo y donde los fakes y las aceitunas amenizan las confesiones destarifadas y tardías, esas que solo haces cuando sabes que las que te escuchan te entienden, lo comparten y lo desmigan, lo hacen suyo, le dan la vuelta, para que puedas volver a empezar…

Y juntas entendemos que nada es tanto ni tan poco, nada tan grande ni tan pequeño, nada donde lo pusimos la primera vez…nada que no nos haga pensar que al final lo que nos queda, son los rincones en los que si podemos ser nosotras, y que con esos rincones nos quedamos, que ahí es donde de verdad todo parece mejor…

Gracias por las risas, mil años que sigáis estando ahí…

2 comentarios:

BARBARELLA dijo...

Yo hoy no he formado parte de esas risas,de ese rincón...no por falta de ganas...pero siempre lo hago,y me encanta estar ahí!!Hoy he estado pero en casa,con nuestro quinto en la mano y haciendo confesiones cual quinceañera que ya me hacía falta...qué bueno es llegar a casa y tenerte,nosabes las ganas que tenía de llegar para contarte!me encanta todo lo que hemos creado y tengo la esperanza de que todo eso te de a ti el impulso necesario para acabar lo inacabado,para retomar lo que quieras retomar y para darte cuenta de que(si quieres)puedes hacerlo!
Seguirán las risas,seguirá ese rincón y seguiremos nosotras,porque cuando algo encaja y sienta bien nadie quiere cambiarlo y en eso estamos.

Te quiero!

:)

Lidón B dijo...

Las cosas sin acabar, se terminan terminando, nuncasabesmuybiencómo...
Y sí, ese rincón es como una terapia. PArece más bien el confesionario de un reality, sigo pensando hque hay una cámara en el techo y nos emiten por internet. Luego tengo paranoias con las sábanas, normal.
Lo no conseguido puede tener más gracia así, aunque no se le vea por ningún lado en el primer momento. O puede ser mejor cuando se consigue. Y des-encuentros, des-miradas, des-llamadas... ¿qué quieres que te diga? grrrrrrrrrrrr


Milllllllones de bessos!